Barbón detalla en el Debate de Orientación Política la batería de medidas que incluirá el presupuesto de 2023 para hacer frente al reto demográfico

El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, ha detallado hoy en el Debate de Orientación Política General la batería de medidas que incluirá el presupuesto del próximo año para hacer frente a la despoblación. “Hemos tomado decisiones para afrontar el reto demográfico todos los años. Cada ejercicio han ido reforzándose sobre el anterior. Las previstas para 2023 superan todas las anteriores: jamás se habrán dispuesto tantos recursos para favorecer la natalidad, apoyar al medio rural, fijar población y ayudar a las familias”, ha valorado.

En este sentido, ha explicado que la Consejería de Hacienda trabaja ya en cuatro propuestas para incluir en el proyecto de las cuentas autonómicas, que recogerá una medida inédita: una ayuda económica para el cuidado de niñas y niños de hasta 3 años. Se trata de un pago de 1.500 euros anuales para familias cuya renta no supere los 45.000 euros, siempre que en su concejo de residencia no existan centros públicos para alumnado de 0 a 3 años o que, en caso de haberlos, no hayan podido acceder a una plaza.

Barbón también ha anunciado que el importe de las ayudas a la natalidad puestas en marcha en este ejercicio se elevará de forma sustancial. Así, de los 1.000 euros actuales por nacimiento del primer hijo o hija se pasará a 1.200. Además, se establecerá un pago de 1.700 por segundo hijo y sucesivos. Si se trata de familias residentes en concejos rurales en riesgo de despoblación, la ayuda llegará a los 2.200 euros, con independencia del orden de nacimiento. Serán considerados municipios en riesgo de despoblación todos aquellos con menos de 20.000 habitantes que hayan perdido al menos un 10% desde el año 2000. Este criterio abarca a 53 de los 78 ayuntamientos asturianos. Como en el caso anterior, el tope de renta se fijará en 45.000 euros.

Asimismo, el Ejecutivo reforzará las deducciones fiscales ya existentes. De este modo, se incrementarán los topes de renta para adecuarlos al crecimiento de la inflación, se redondearán al alza los importes de la mayor parte de las deducciones y se aplicará el concepto de concejos rurales en riesgo de despoblación para que el número de personas beneficiarias se multiplique.

Por último, se rebajará la tributación económica sobre el suelo rústico y las explotaciones agrarias, en congruencia con el compromiso del Principado con el medio rural y conforme a lo acordado en la comisión parlamentaria sobre el reto demográfico.