El presidente apela a la responsabilidad para aprobar el presupuesto que plantea el mayor esfuerzo fiscal de la historia frente al reto demográfico

Adrián Barbón ha definido hoy el proyecto de presupuestos para 2023 con tres rasgos: “el mayor de la historia, con cerca de 6.000 millones; con las deducciones más altas de la historia y con las ayudas más altas de la historia”, todas enfocadas al impuso demográfico de Asturias. Tras haber desgranado una larga serie de medidas, también ha extraído su propia conclusión política: “Estoy en el gobierno, pero si estuviese en la oposición, jamás votaría no a este presupuesto”.

El Consejo de Gobierno aprobó el jueves el proyecto presupuestario, que se eleva a 5.968 medidas. Ese mismo día, la consejera de Hacienda, Ana Cárcaba, explicó sus líneas generales. El viernes le tocó hacerlo en Siero a la titular de Derechos Sociales, Melania Álvarez y en los próximos días continuarán las explicaciones por distintos concejos el resto de los consejeros y consejeras, como corresponde “a un gobierno pegado al territorio”. Hoy ha sido el propio presidente quien se ha encargado de resaltar el esfuerzo incluido en las cuentas para afrontar el desafío demográfico.

El jefe del Gobierno ha resumido las principales medidas, que se resumen en el documento adjunto. Las dividió en tres apartados:

a)   Las ayudas directas a la natalidad y al cuidado de los niños de 0-3 años (las denominadas ayudas Concilia), así como la extensión de la garantía energética, que beneficiará a 30.000 familias más. Sólo este capítulo supone un esfuerzo presupuestario de unos 42 millones que puede beneficiar, de una u otra manera, al 94% de la población.

b)  La creación de nuevas deducciones fiscales y mejora de las ya existentes. Por ejemplo, la deducción de 300 euros por hijo hasta los 25 años y de 1.000 euros para los jóvenes emancipados hasta los 35 años, o la ampliación de las deducciones para familias numerosas o monoparentales, por arrendamiento de vivienda interanual o por nacimiento o adopción de menores.  Barbón ha enfatizado que estas decisiones –que conforman la denominada vía fiscal asturiana- superan ampliamente el impacto de la deflactación que reclamaban algunos partidos, con una gran diferencia: las propuestas por el Gobierno de Asturias están orientadas a la clase media y trabajadora, a la “mayoría social”, en tanto que la deflactación reclamada por la derecha acabaría beneficiando más a las rentas altas.

c)  El tercer bloque incluye otro tipo de medidas que, de una manera u otra, contribuyen al impulso demográfico: la ampliación del ticket rural, el aumento de la inversión en carreteras (con 15 millones para el suroccidente), la extensión de la tarifa plana ConeCTA que permite viajar sin límite en transporte público por 30 euros al mes, el mantenimiento de las escuelas rurales… Entre ellas, Barbón ha resaltado que la ampliación del límite de rentas permitirá que las escuelas infantiles sean gratuitas para el 75% de las familias.

“Si los partidos de la oposición analizan estas propuestas, sólo cabe un voto posible: el sí a los presupuestos, que es el sí a los intereses de Asturias”, ha afirmado el presidente. A su juicio, la negociación y tramitación parlamentaria del presupuesto se convertirá en un “test de responsabilidad” que retratará a cada fuerza política. Hasta el momento, sólo Izquierda Unida y un diputado del grupo mixto han anunciado su voto favorable. No obstante, Podemos también ha reconocido avances importantes.