“Queremos avanzar hacia un modelo de escuela que ayude a prevenir cualquier tipo de violencia sexista y atajar hasta el más mínimo resquicio de desigualdad”, afirma el presidente

El presidente del Principado ha asegurado hoy que Asturias “pretende hacer de la coeducación una seña de distinción de su modelo de enseñanza”. Adrián Barbón también ha detallado el objetivo preciso del Gobierno del Principado este este campo: “Queremos avanzar hacia un modelo de escuela que ayude a prevenir cualquier tipo de violencia sexista y atajar hasta el más mínimo resquicio de desigualdad”.

Barbón ha intervenido esta mañana en Avilés en la inauguración del Encuentro Internacional de Coeducación Igualdad en la educación, igualdad en la vida, junto con las ministras de Igualdad, Ana Redondo, y de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría. "Asturias es tierra de igualdad", ha subrayado ante el público del encuentro.

A juicio del presidente, la coeducación “es el primer peldaño de la escalera hacia la igualdad” y, por tanto, “hacia una sociedad mejor”. En este sentido, ha recordado que el Principado inició ese ascenso hace más de tres décadas, “siempre empujado por la fuerza del potente movimiento feminista asturiano”. Como ejemplo de ese impulso ha citado iniciativas singulares, como la Casa Malva o el Centro de Crisis para Víctimas de Agresiones Sexuales, que se han convertido “en referencia para toda España”.

En cuanto a las medidas en curso, el jefe del Ejecutivo ha destacado especialmente el plan de coeducación del sistema educativo, que el curso pasado se puso en marcha en Infantil, Primaria y Secundaria, así como en Formación Profesional y en los centros de educación especial. También se ha referido al programa Coeducastur, que incluye materiales adaptados por etapas educativas y que este curso se expandirá a medio centenar de centros de Primaria.

A continuación, se reproduce íntegramente la intervención del presidente.

INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE DEL PRINCIPADO DE ASTURIAS, ADRIÁN BARBÓN

Encuentro Internacional de Coeducación Igualdad en la educación, igualdad en la vida

Están ustedes en su casa por muchas razones, aunque voy a citar solo dos. La primera, porque esta es una comunidad acogedora, dispuesta siempre a recibir con los brazos abiertos a quienes nos visitan. La segunda, porque vienen a debatir sobre un asunto del que el Principado hace bandera. Asturias es tierra de igualdad.

Confieso que en estos días he consultado varias fuentes en busca de una definición precisa del término coeducación. Creo que he hallado una muy ajustada, precisamente en la web de este encuentro: la coeducación es la educación libre de sesgos y estereotipos, con perspectiva de género, igualitaria y generadora de referentes femeninos y masculinos comprometidos con la igualdad.  La coeducación es, por tanto, el primer peldaño de la escalera hacia la igualdad y, con ella, hacia una sociedad mejor.

Asturias comenzó ese ascenso hace más de tres décadas. Este no es el momento ni el lugar para relatarles todos los escalones que hemos ido subiendo, siempre alentados por la aspiración de la igualdad, siempre empujados por la fuerza del potente movimiento feminista asturiano.

La Casa Malva o el Centro de Crisis para Víctimas de Agresiones Sexuales se han convertido en referencia para toda España. La alcaldesa de Avilés, que fue ponente en el Congreso tanto de la ley contra la violencia de género como de la ley de igualdad, conoce muy bien cómo hemos sabido renovar ese impulso legislatura tras legislatura.

Nuestro plan de coeducación responde a ese mismo propósito.  A nosotras no nos frena el viento de la involución. No hay retroceso que valga cuando se trata de avanzar en derechos y ganar en igualdad. O, si no, que lo intenten con Gimena Llamedo y Lydia Espina las dos mujeres que, al frente de las consejerías de Presidencia y Educación, han colaborado estrechamente para elaborarlo. Que lo intenten, que van dados.

El objetivo es muy claro: queremos avanzar hacia un modelo de escuela que ayude a prevenir cualquier tipo de violencia sexista y atajar hasta el más mínimo resquicio de desigualdad. Para ello, vamos a convertir la coeducación en una marca de calidad del sistema educativo asturiano. Vicepresidenta, consejera, ya que hablamos de aulas, escuelas e institutos, aquí os encomiendo una buena tarea: hacer de la coeducación una seña de distinción de nuestro modelo de enseñanza. Con vosotras estoy seguro de que podremos lograrlo.

Precisamente, en este curso consolidamos nuestro plan de coeducación. El año pasado implantamos el proyecto en las etapas de Infantil, Primaria y Secundaria, así como en Formación Profesional y en los centros de educación especial.
Ahora hemos dados un paso más con rutas formativas para implicar a toda la comunidad educativa, desde el servicio de inspección hasta las familias.   

A mayores, y bajo el paraguas del plan de coeducación, en noviembre presentaremos formalmente el programa Coeducastur, que incluye materiales adaptados por etapas educativas. En los últimos tres años ha llegado a las aulas de nueve colegios y al profesorado de cinco institutos. Este mismo curso pretendemos expandirlo a 50 centros de Primaria para continuar extendiéndolo durante los próximos.

Insisto en el mensaje que enuncié al inicio de mi intervención. Asturias quiere hacer bandera de la coeducación porque no solo es justo, sino imprescindible. Pensemos por un momento en principios básicos como la igualdad efectiva de derechos y oportunidades entre hombres y mujeres, el rechazo al maltrato, la prevención de la violencia de género o el uso no sexista del lenguaje. Pues bien, son conceptos que una sociedad moderna ya debería tener interiorizados e incorporados, Sin embargo, la tozuda realidad nos demuestra que no es así, que aún queda camino y que las bases para asimilar estos fundamentos deben sentarse desde la escuela. Ese, reitero, es el primer peldaño, y en Asturias ya estamos construyéndolo.

Os deseo un buen encuentro. Estáis en vuestra casa. Asturias, recordadlo, es tierra de igualdad.